El centenario de Hachiko: Japón celebra el nacimiento del perro fiel convertido en símbolo de la lealtad
Hachiko, un perro Akita japonés, se ha convertido en un símbolo icónico de lealtad en todo el mundo. Su historia comenzó a principios de la década de 1920, cuando fue comprado por Hidesaburo Ueno, profesor de la Universidad de Tokio.
Hachiko rápidamente desarrolló un fuerte vínculo con el profesor y lo saludaba en la estación de tren todos los días cuando regresaba del trabajo. Sin embargo, la tragedia se produjo cuando el profesor Ueno falleció repentinamente en el trabajo. Hachiko continuó esperándolo en la estación de tren todos los días durante los siguientes nueve años, con la esperanza de que su dueño regresara.
Se convirtió en una visión familiar para los viajeros y su lealtad y devoción inspiraron a muchos. La historia de Hachiko ha quedado inmortalizada en libros, películas e incluso en una estatua de bronce erigida en la estación de tren de Shibuya, en Tokio, donde solía esperar a su dueño. Hoy, en el centenario del nacimiento de Hachiko, Japón celebra su inquebrantable lealtad y dedicación.
La historia de Hachiko sirve como recordatorio del vínculo duradero entre humanos y animales y el poder del amor incondicional. Su lealtad ha trascendido fronteras y culturas, inspirando a personas de todo el mundo. La historia de Hachiko también resalta la importancia de la raza Akita en Japón. Los Akitas han sido venerados en Japón.